Hi Tech Historia del primer 5.13 en Colombia

Por Arturo Saad

Orson, el compañero de pegues en los 90´s en Suesca

Una soleada tarde a mediados de abril del 95, descubro los movimientos del crux por el lado izquierdo. Repito la secuencia, estoy listo para darle el pegue encadenador, pero está oscureciendo... ¡Mañana le vamos con todaaa!

Línea y Apertura

A principios de los 90s, la FFME (Federación Francesa de Escalada y Montañismo) creó un programa de impulso de la escalada deportiva en el mundo. Enviaron instructores a países con escalada en desarrollo para enseñar técnicas, entrenamiento, reglamento, organización, juzgamiento de campeonatos y la apertura y trabajo de rutas de alta dificultad para dejar como proyectos. Uno de estos fue Hi-Tech.

Ese año estaban Gilles Bernigole y Frank Scherrere, dos muy buenos escaladores y entrenadores de la FFME, quienes habían acompañado este proceso desde sus comienzos.

Fercho le había echado el ojo a esa línea. Se la mostramos a los franceses, les pareció perfecta y decidimos montarnos.

Pusimos las chapas entre todos: los franceses, Fercho, Andrés Bonilla, Pitón, Tribi, yo y otros que me disculpo si los estoy omitiendo.

Primeros Pegues

Comenzamos a darle pegues. Frank solucionó el primer crux haciendo un lolot para evitar pararse en las presas de “Sueños”, que ellos consideraban que no pertenecían a la ruta. Algunos logramos la secuencia hasta el Crux. Durante esos dos o tres días, ensayamos la salida por el lado derecho sin éxito. Gilles alcanzó a hacer un par de movimientos más. Fue el high point de la temporada! Se fueron los franceses y ahí quedó...

Dificultad y Nombre

Gilles y Frank, quienes tenían experiencia con octavos grados (sin encadenar la ruta), proponen que puede ser 8a+. Nosotros, ignorantes en esas dificultades, aceptamos lo que dicen. En Suesca, en ese momento, las rutas más duras eran dos 12b.

Aunque aún no se había encadenado, ¡teníamos que ponerle nombre a la ruta! Estamos todos de acuerdo en que es una ruta muy técnica, por lo que alguien propone: “–¿Alta técnica?”. “Mmmm... ¿Hi-Tech?”, dice otro. Ese suena mejor y así se queda. Después, en la guía, aparece como Hi-Tec.

Solución del Crux

Medio año después, al finalizar el Panamericano de Exposport ’95, Juanjo Fernández, fuerte escalador chileno, y yo retomamos la ruta.

El pie del crux es especialmente chiquito, inclinado, liso y difícil de pararse en él, por lo que decidí probar con los diferentes tipos de zapatos que tenía: probé con súper blandos, Ninja de Boreal, mmm no; ultra rígidos, de suela de 3 mm, Tao Cuir de La Sportiva, tampoco; Asolo intermedios, nada. Por último, ensayo con Lynx de Five Ten, éstos me sostienen ese microsegundo más que se necesita en ese paso!

Decido no ensayar más por la derecha; me parece muy largo el movimiento, a los altos les queda mejor. Ensayo por la izquierda, me tengo y descubro los pasos por ahí. Repito la secuencia, estoy listo, pero se hace noche...

Con la tarde anaranjada, quitamos las primeras cuatro cintas y dejamos las otras puestas para el día siguiente. Me duermo repasando los movimientos.

Un Día Especial

El día amanece “Suescuno”, blanco y ligeramente lloviznoso... No me afecta, ¡estoy enfocado! Mientras nos acercamos por la carrilera, vemos que hay paseo en “Travesuras”, ¡con vallenato a todo volumen y haciendo asado! ¡Justo bajo la ruta! ¡Nooo! ¡Focus, Artuuur, focus! Visualizo la secuencia... Llegamos a la ruta y Juanjo me dice sorprendido:

“Oye, Arturo, ¡no hay cintas!”.

¡Ya no hay “focus Artur” que valga! Nos habían robado las cintas. Seguimos caminando hacia el fondo buscando nuestro equipo; no tardamos mucho en ver un grupo de tres, en “Puños”, con cintas de colores como las nuestras.

Nos acercamos y sí, ¡son las nuestras! Los tipos están sucios; al principio se resisten a devolverlas, los ánimos se acaloran.

Uno de ellos decide confesar y les dice a los otros que las devuelvan. Cuando lo hacen, les preguntamos cómo las habían quitado. Nos cuentan que las habían visto y habían creído que alguien las había abandonado... Pero, como no podían llegar escalando, habían subido por detrás y, desde el poste, habían rappelado por el tierrero para alcanzarlas; como la cuerda no llegaba al piso, les había tocado subir halándose...

En fin, volvemos a la ruta, hay que volver a poner las cintas.

Me trepo sin expectativas. Comienzo a escalar entre el vallenato, el humo del asado y las preguntas de los curiosos.

Voy encadenando sin problema el inicio, paso el primer crux, las voces, el humo y el vallenato se desvanecen... El micropié vertical y la mano derecha en el slab me sostienen justo para hacer el paso y llegar a la regletica, organizo pies y alcanzo el slopper vertical, junto manos y juaaaaz! Un zarpazo a la regleta y me tengo!! EEEEEEE!! ¡Pasé el crux! En la placa final, la excitación se transforma momentáneamente en ansiedad al ver los últimos pasos de salida hasta el top, que no son del todo fáciles y no los había trabajado! Pero nada... de aquí ya no me caigo! Y la ruta sigue fluyendo hasta el fin.

Juanjo insiste por la derecha, tiene todos los pasos, pero no encadena... Pasa un año, hasta el siguiente Panamericano, cuando vuelve y hace el segundo encadene.

30 Años Después

No sabíamos que ésta ruta se convertiría en un hito y un mito de la escalada de nuestro país.

Para nosotros, en ese momento, fue el motivo para cambiar nuestra percepción de la escalada: pasar de la aventura al deporte de alto nivel, que requiere disciplina, entrenamiento, constancia, aprendizaje y adaptación, tanto para la alta dificultad en roca como para lograr resultados en las competencias.

Agradecimiento a Gilles y Frank, que nos guiaron en ese nuevo mundo del alto rendimiento.

¿Sabían que Hi-Tech se encadenó 11 años después de que se abrieron las primeras rutas de escalada deportiva en Suesca? Esperen la Historia de la Escalada Deportiva en Colombia.

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